Estas son algunas prácticas sencillas que, de incorporarse a la vida diaria, pueden optimizar y reducir el gasto de electricidad y gas. Así lo reseña Estampas.com:
Iluminación
1- Utilice lo más posible la luz del día. Aproveche la luz solar, abriendo cortinas y persianas en las horas tempranas o crepusculares.
2- Adecue la cantidad de luz a sus necesidades. Si hay que iluminar toda una habitación, utilice varios puntos de luz en lugar de uno solo.
3- En habitaciones con muchos puntos de luz, es recomendable instalar varios interruptores para iluminar solo las zonas que se precisen.
4- Reemplace los bombillos incandescentes por los de bajo consumo en aquellas áreas de su hogar que permanecen iluminadas por más tiempo. Si bien son más caros que los tradicionales, su eficiencia lumínica y duración son superiores: con sólo 11 vatios iluminan lo mismo que una incandescente de 60 vatios. Su vida media útil es de unas 8.000 a 12.000 horas frente a poco más de 1.000 de un bombillo convencional.
5- Evite las lámparas de araña con multitud de bombillos. En su lugar, prefiera plafones claros y transparentes.
6- Si está trabajando en el escritorio es mejor utilizar una lámpara de mesa; iluminar toda la habitación supone un gasto innecesario.
7- Mantenga limpias las pantallas de las lámparas y los bombillos a fin de evitar pérdida de luz.
8- Si tiene bombillos incandescentes, siempre apague la luz al salir de la habitación y ahorrará un gasto energético innecesario.
9- Los tubos fluorescentes y los bombillos ahorradores consumen más energía al momento de encenderlos que los tradicionales. Por lo tanto, apague la luz sólo si no va a regresar a la habitación en los próximos 20 minutos. En caso contrario, déjela encendida: ahorrará energía y prolongará la duración de sus bombillos.
10- Incorpore iluminación con leds en sitios donde la luz se utiliza como elemento de decoración o para crear un ambiente determinado. Los leds tienen un consumo mínimo: un led de solo 1 W puede iluminar perfectamente una planta u otro elemeto decorativo.
En la cocina
11- Cuando cocine, utilice recipientes más grandes y que sobresalgan del fogón, a fin de aprovechar mejor la energía eléctrica o de gas. Para los recipientes pequeños utilice las hornillas más pequeñas.
12- Emplee tapas en las ollas y cacerolas, aprovechan mejor el calor, se puede utilizar menos fuego y la comida tendrá más gusto.
13- Al llegar al hervor, disminuya el calor de la hornilla. El agua hierve a 100º C, no es necesaria más temperatura para que continúe la cocción de los alimentos.
14- Utilice la olla a presión. En menos de 15 minutos obtendrá el mismo resultado que una cocción normal de dos horas. Cuando expulse el vapor, baje el fuego al mínimo y cuente el tiempo necesario según el tipo de alimento.
15- Aproveche el calor residual. En las cocinas eléctricas con placas de resistencia apague unos minutos antes la placa, el calor residual continuará la cocción. También puede hacerlo con la sandwichera.
16- Lo mismo aplica para el horno: si no se trata de gratinados, apáguelo unos minutos antes, el calor residual del interior terminará la cocción del alimento.
17- Evite abrir frecuentemente la puerta del horno, perderá un 20% de calor cada vez. En su lugar, observe la cocción a través de la ventana.
18- Mantenga una separación de 5 cm entre la nevera y la pared a fin de permitir una correcta aireación de la rejilla trasera. Una vez al año, retire un poco la nevera y pase un plumero por la rejilla.
19- Evite colocar alimentos tibios o calientes dentro de la nevera, aumentará la temperatura interior obligando a trabajar el motor durante varias horas.
20- Descongele los alimentos a temperatura ambiente en lugar de usar el microondas. Fuera de la bolsa y sobre el tope de la cocina, los alimentos descongelan rápidamente.
21- Mantenga el congelador libre de escarcha y hielo. El motor trabajará durante muchas horas al día, originando un gran gasto de electricidad, solo para mantener congelado el hielo acumulado en las paredes interiores, cuando su misión es mantener en buen estado los alimentos.
22- En épocas de calor es necesario deshielar más a menudo el congelador, debido a la condensación de agua producida por el calor y el frío al abrir la puerta.
23- Limpie periódicamente el interior de la nevera, compruebe el estado de los alimentos guardados y su fecha de caducidad. Muchas veces gastamos electricidad para conservar en frío salsas y condimentos que no empleamos a menudo, comprobando luego que han caducado.
24- Regule la nevera para que permanezca a 5º C en su interior y mantenga el congelador a -18º C, (puede usar un termómetro para tal fin). Recuerde que el gasto eléctrico de una nevera es de 150 W por hora y funciona las 24 horas del día, todo el año.
25- Utilice el lavaplatos automático con su carga al máximo. Comprar algunas piezas extra de vajilla puede resultar más económico que el gasto de electricidad y agua.
26- Evite colocar dentro del lavaplatos los utensilios de gran tamaño, pueden lavarse a mano y restan espacio a muchas piezas que ocuparían su lugar.
27- Aclare los platos antes de introducirlos en el lavaplatos: junte un poco de agua tibia en el fregadero y sumérjalos. Esto le permitirá usar los programas económicos de lavado, que consumen menos agua y electricidad.
En el lavandero
28- Utilice la lavadora a carga completa y ajuste la temperatura lo más bajo posible; si utiliza detergentes de calidad no será necesario calentar demasiado el agua (normalmente a 30º C puede obtener buenos resultados). Tenga en cuenta que el factor de más consumo es la resistencia que calienta el agua, no el motor que gira el tambor.
29- A la hora de adquirir electrodomésticos nuevos, opte por los ecológicos clase A o superior (clases A+ y A++); brindan los mismos beneficios con un consumo de energía 70% menor que otros de la clase G.
30- También gastará menos energía con lavadoras y lavaplatos que tengan entrada de agua fría y caliente separadas. De esta forma, el agua caliente es calentada rápidamente por el calentador de la casa, evitándose un largo período de tiempo hasta que la resistencia eléctrica del artefacto alcance la temperatura.
31- Regule el calentador de agua para que entregue la temperatura justa de agua caliente para la cocina y el baño. No tiene sentido gastar energía y dinero para calentar agua para después mezclarla con agua fría porque está demasiado caliente.
32- Al momento de planchar, comience por las prendas más grandes y que necesiten mayor temperatura. Luego desconecte la plancha y aproveche el calor residual para las prendas más pequeñas.
Equipos eléctricos y electrónicos
33- No deje conectado el cargador del celular cuando haya retirado el teléfono; habrá un pequeño consumo además del riesgo de que el transformador se estropee. Si dispone de varios cargadores, agrúpelos en una regleta y apáguela cuando no los utilice.
34- Agrupe los equipos electrónicos por sectores utilizando regletas o protectores de voltaje con enchufes múltiples (los de 6 se aprovechan mejor) e interruptor de encendido (verifique que el conjunto de los aparatos conectados no sobrepasen el límite de consumo soportado indicado en el protector). Cuando no utilice el grupo conectado a éste, apague el botón de encendido, esto desconectará de la red todos los aparatos involucrados, evitando el consumo fantasma.
35- Cuando salga de vacaciones, desconecte todos los equipos electrónicos si va a dejar la nevera encendida o si cuenta con un sistema de alarma. De lo contrario, apague el brake principal. Si dispone de tablero eléctrico dividido en sectores, apague aquellos que no sean necesarios durante su ausencia.
36- Ajuste el salvapantallas del computador para que se active al cabo de 5 minutos durante 5 minutos más, y active el apagado automático del monitor al cabo de 10 minutos. Ahorrará energía y alargará la vida útil de los componentes.
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Climatización
37- Durante las horas que el sol refleje en su casa, aísle el interior con cortinas que dejen pasar la luz pero no los rayos solares. Cuando el sol pegue de lleno en sus ventanas, cierre las persianas. En las horas de sombra o más frescas, deje las ventanas abiertas para refrescar la casa. Durante la noche deje las ventanas abiertas, el uso de cortinas gruesas pero de tejido abierto protegerá su intimidad.
38- El aislamiento es importante para evitar pérdidas en la climatización del hogar. Compruebe que las ventanas cierren herméticamente o coloque burletes de esponja o PVC para evitar la fuga o entrada de aire a través de las rendijas. Reemplácelos por unos nuevos cuando se despeguen o estén secos o resquebrajados por el tiempo.
39- El exceso de humedad suele ser más molesto que el calor. Incorpore un medidor de humedad y temperatura en los sitios donde pasa más tiempo con el soporte de aire acondicionado, le será de ayuda para comprobar resultados.
40- Cierre las puertas de aquellas habitaciones que no usa mientras está encendido el aire acondicionado; la temperatura y la humedad descenderán más rápido.
Consumo fantasma
Aunque estén apagados, los electrodomésticos y equipos electrónicos que permanecen enchufados producen un bajo consumo (alrededor de 5 W por equipo), ya que utilizan un transformador interno para convertir la corriente alterna en corriente continua de bajo voltaje.
Por otra parte, la función denominada «en espera» (stand by) hace que los aparatos sigan consumiendo energía a pesar de no estar encendidos. Esta función se presenta en dos modalidades: espera pasiva, cuando el aparato está desconectado pero queda algún componente activo (por ejemplo, el reloj en los hornos microondas) y la espera activa, cuando sigue realizando alguna tarea, como el televisor digital programado para grabar a una hora determinada.
Se estima que un 10% del consumo eléctrico de un hogar es causado por los electrodomésticos (línea blanca y marrón) en modo stand-by y los transformadores.
Mayor consumo
En el hogar, los aparatos que más electricidad consumen son los siguientes, calculados en vatios por hora:
Cocina vitrocerámica eléctrica, con placas de resistencias y/o halógenas: 1.250 W – 2.200 W cada hornilla
Cocina eléctrica clásica de placas de resistencias: 1.000 W – 2.000 W cada fogón
Secadora: 3.000 W (algodón) 1.200 W (sintéticos)
Horno eléctrico: 2.000 – 2.500 W
Parrillera eléctrica: 2.500 W
Aspiradora: 1.700 – 2.500 W
Aire acondicionado: 1.300 – 1.700 W
Lavaplatos automático: 1.200 – 1.500 W
Calentador eléctrico: 1.200 – 1.500 W
Plancha: 1.200 – 2.500 W
Lavadora: 1.100 – 1.300 W
Secadores y alisadores de pelo: 1.000 – 1.200 W
Tostador: 1.000 W
Microondas: 800 -1.000 W
Cafetera eléctrica: 500 W
Nevera: 150 (el consumo aproximado es de 1.500 W al día)
Menor consumo
(Calculados en vatios por hora):
TV de plasma: 220 W
Televisores LCD: 180 W
Televisores de tubo: 90 W
Computador personal: de 50 W a 100 W, dependiendo de los periféricos conectados y el trabajo realizado.
Monitor de PC: 50 – 75 W
Ventiladores: 40 W – 60 W la mayoría, hasta 150 W los más grandes.
Electrónica en general (varía según el aparato): 20 – 50 W