¿Burocracia en sector construcción beneficia a inmobiliarias en Panamá? | YoEmigro.com

¿Burocracia en sector construcción beneficia a inmobiliarias en Panamá?

Según empresarios del sector construcción para revisar y aprobar un plano de construcción es necesario acudir a seis instituciones del Estado, entre cinco y nueve meses y cumplir con más de 60 requisitos. Así lo reseña ANpanama.com, con un trabajo periodístico de Ricardo González:
Construccion Panama
La paralización en la aprobación de los permisos de construcción y la cantidad de trámites necesarios para iniciar un proyecto mantiene preocupados y hasta molestos a los representantes de las empresas constructoras, que han visto detenidos varios de sus proyectos. Incluso alegan que se está afectando a la economía del país, debido a que este es uno de los sectores que absorbe la mayor cantidad de mano de obra.
Sin embargo, como sucede en muchas ocasiones, lo que es un mal para algunos es un beneficio para otros. En este caso, para las empresas inmobiliarias y corredores de bienes raíces la situaión ha sido positiva, ya que les ha permitido salir del inventario que tenían disponible y han logrado que los precios se estabilicen.
Osvaldo Marchena, expresidente de la Asociación de Corredores de Bienes Raíces de Panamá (ACOBIR) y asesor de la firma Tribaldos, explicó que esta situación no se debe ver simplemente como que se ha perjudicado a la construcción y beneficiado a las inmobiliarias, porque la situación es un poco más compleja.
Destacó que si bien es cierto que los permisos de construcción han bajado de ritmo, registros de la propia Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC) demuestran que para mediados de este año los permisos de construcción se han incrementado en 5,7%, en clara señal de que el mercado se mantiene dinámico.
Cifras de la Contraloría General de la República indican que de enero a junio de 2015 se solicitaron permisos para la construcción de residencias por un valor de US$407 millones y por US$448,5 millones para proyectos no residenciales.
Esto es positivo para las empresas de bienes raíces, considera Marchena, porque actualmente hay nuevas ofertas en el área residencial, específicamente en el segmento de interés preferencial y en oficinas, aunque un poco menos, porque todavía hay suficiente inventario.
Para las empresas de bienes raíces el escenario es favorable, porque tienen un inventario que le pueden presentar a los diferentes sectores, que son los que absorben estos proyectos.
Sin embargo, sostuvo igualmente que la relentización de nuevos proyectos tiene su impacto porque contribuye a salir del inventario existente, ya que si una persona quiere comprar una casa o bien una empresa desea adquirir una nueva oficina y no hay nuevas opciones en construcción en el horizonte, lo más probable es que opte por adquirir una propiedad que ya está disponible, sin que esto signifique que los precios aumenten o disminuyan.
“La oferta permite presentarle al consumidor un producto terminado que puede adquirir de manera inmediata y esto tiene un impacto directo con el sector de hipotecas que, de manera inmediata, empieza a extenderse de manera favorable a otros sectores de la economía”, precisó Marchena.
Recalcó que las empresas de bienes raíces se han enfocado en mostrar la oferta y las áreas donde están disponibles. “Nosotros, como intermediarios, simplemente le planteamos a los interesados las oportunidades para que ellos las puedan evaluar y decidir si la adquieren o no”, agregó.
Según los empresarios del sector, revisar y aprobar un plano de construcción involucra a seis instituciones del Estado, que tardan entre cinco y nueve meses en los trámites y es necesario cumplir con más de sesenta requisitos, mientras que aprobar un estudio de impacto ambiental puede demorar hasta doce meses.
Las empresas constructoras y desarrolladoras proponen reducir el número de trámites y agilizar los tiempos de aprobación. Para ello, la directora ejecutiva del Consejo Nacional de Promotores de Vivienda (Convivienda), Elisa Suárez de Gómez, anunció que en las próximas semanas se conformará una mesa técnica, encargada de evaluar esos sesenta requisitos, en conjunto con todas las instituciones.
El presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC), Roderick McGowen, aseguró que hasta el mes de marzo había US$1.000 millones en proyectos de construcción paralizados, debido a la mora de la Dirección de Obras y Construcciones del Municipio de Panamá en la aprobación de los planos.
Esta situación fue comunicada a la Alcaldía de Panamá en septiembre de 2014, pero hasta la fecha no se ha visto una agilización en los trámites. Según McGowen, actualmente entre hacer los trámites y poner el primer bloque transcurre un año.
Explicó que la falta de personal idóneo en la Ventanilla Única, integrada por 18 instituciones, la cual está bajo el paraguas de la Dirección de Obras y Construcciones, está retrasando estos permisos.