La venezolana residente en Panamá, Lay Pino, ha compartido en nuestro grupo de Facebook “Inmigrantes en Panamá” la siguiente reflexión que es muy pertinente en este momento, debido a que hace un llamado de atención a la desunión que existe entre venezolanos en el mundo, y que, luego de editarla para mejorar su legibilidad la compartimos con todos ustedes a continuación:
Me siento un poco aturdida ya que anoche fui a una cumpleaños de una compañera de trabajo Panameña y entre los invitados habían varias nacionalidades, entre ellos se encontraban algunos venezolanos, colombianos y peruanos, la mayoría de ellos eran muy autóctonos y con poco tiempo en Panamá.
El caso es que en esa reunión, entre tantas conversaciones, salió a colación el tema de la solidaridad entre paisanos y llegamos a la conclusión de que la comunidad de venezolanos en Panamá es muy grande pero no nos apoyamos entre nosotros.
Y ojo, no estoy hablando de apoyos económicos, monetarios ni de apego emocional, sino de la picardía y de la viveza criolla de muchos paisanos entre nosotros mismos y para con los demás, por ejemplo, hay muchos casos de algunos que viven alquilados en una habitación y se van escondidos en la madrugada para no ser vistos por los dueños y de esa forma no pagar el alquiler, y esa es una razón importante por la que se debe pedir depósito cuando vas a alquilar.
Otros que piden “fiao”, o sea, a crédito y luego desparecen. También es muy común ver que cuando hay dos o más venezolanos trabajando juntos en algún sitio siempre se tiran entre ellos, o sea, todos hablan mal de todos siempre buscando dejar mal a su coterráneo, y no sólo cuando están juntos, sino la mayoría de las veces que hablas con un venezolano te das cuenta que lo que hace es hablar mal de sus compatriotas.
Cónchale, sean consciente, cuando hacen eso no sólo afrentan a la persona sino también a su familia que depende de él.
Otra de las cosas que se ha visto mucho últimamente es que alguien pide prestados los 500 dólares para ir a Costa Rica a sellar y resulta que se coge el dinero y se devuelve a Venezuela y no lo ves más nunca. También están los que piden prestado y no pagan y así sucesivamente.
Amigos, todos los que vinimos a Panamá fue a sumar, no lo hicimos en plan de turismo, estamos aquí para trabajar y ganar dinero para mandar a nuestros familiares que se las están viendo negras en Venezuela y también para ahorrar lo que podamos.
Casi todos los que estamos aquí, tenemos las mismas necesidades y problemas, todos salimos de nuestra área de confort para irnos a otro sitio a bajar la cabeza, mordernos la lengua y trabajar muy duro sin importar las injusticias, entonces, por favor no actuemos de una manera que nos desprestigia a todos, porque por uno pagamos los demás.
Si usted debe dinero, pague, no pretenda hacerse el loco y si no debe, no se empeñe ni se endeude en lo que no pueda pagar, porque todo dólar vale. No abuse de la generosidad de la gente, sepa ser agradecido a los que le tienden la mano.
Mil bendiciones para todos y aprendamos a ser agradecidos que la tierra gira y no sabemos donde podamos estar mañana. Refuercen los valores del respeto, la solidaridad y el amor.
Lay Pino
