Debido a la crisis que pasa Venezuela , más de 5 mil ciudadanos abandonan a diario su país y se estima que más de 3,4 millones de personas han dejado ya el país caribeño.

Según la OEA, en caso de que la crisis económica y social persista, para fines del 2020 la cifra migrantes venezolanos se ubicaría entre 7,5 millones y 8,2 millones, es decir, superaría el número de refugiados sirios.
«La crisis aumentará en cantidad e intensidad este año, ya que miles están abandonando Venezuela, desesperadamente, para buscar seguridad y mejorar sus condiciones de vida, en medio de un agudo deterioro de las condiciones socioeconómicas y políticas de su país», indicó Joao Diniz, Líder Regional de World Vision en Latinoamérica y el Caribe.
La mayoría de estos migrantes venezolanos se encuentran en Colombia (1,2 millones), Perú (700.000), Chile (266.000), Ecuador (250.000), Argentina (150.000) y Brasil (100.000).
Por eso, World Vision (WV), ONG internacional humanitaria y cristiana, lanza ‘Esperanza sin Fronteras’, una iniciativa enfocada en atender las necesidades más urgentes de los migrantes venezolanos en Colombia, Brasil, Ecuador y nuestro país.
World Vision ha brindado ayuda a casi 93 mil personas en lo que va del 2019, pero prevé beneficiar a más de 260 mil hasta finales de año. De esta forma, las familias que arriban hambrientas, enfermas y sin los medios para generar ingresos económicos recibirán el apoyo esencial para poder salir adelante. Las áreas prioritarias serán:
RESPUESTA EN EMERGENCIA
Mediante la provisión de alimentos, agua, kits de higiene, vacunación y espacios de lactancia, además de lugares temporales de refugio que permitirán a los padres y cuidadores de niños y niñas adquirir insumos básicos para la subsistencia familiar.
PROTECCIÓN INFANTIL URGENTE
Mediante el establecimiento de ‘espacios amigables’ con la niñez donde se provee apoyo psicosocial y emocional a los niños que arriban tras semanas en tránsito y asesoría a los migrantes para prevenir que se conviertan en víctimas de explotación laboral y sexual, abuso y trata.
INCLUSIÓN SOCIAL, ECONÓMICA Y CULTURAL
La sólida colaboración con gobiernos y líderes locales, la sociedad civil e iglesias busca prevenir la xenofobia y discriminación en contra de los migrantes venezolanos. Mediante programas de base comunitaria se promueven iniciativas que estimulan la empleabilidad, el emprendimiento y la generación de ingresos y medios de vida para las familias, especialmente para padres de familia, apoderados y jóvenes.
Este programa beneficiará tanto a las familias migrantes, como a las comunidades anfitrionas en Brasil, Colombia, Perú y Ecuador.