El estado de Bienestar está asociado a mediaciones provenientes del estado para garantizar servicios básicos a la población a través de un sistema de protección social, evidentemente constituye a un logro por parte del estado, sin este concepto la idealización de un país estable, una economía fortalecida o una sociedad desarrollada no pudiese ser posible.
El origen del estado de bienestar se produjo específicamente en Alemania en el siglo XIX donde países capitalistas en busca de industrialización tenían en planes incluir medidas de protección no solo en el aspecto económico, sino también social, la lucha contra la pobreza y protección en el ámbito laboral, es importante resaltar que Alemania incluyó los seguros sociales obligatorios por primera vez, generando de alguna manera el estado de bienestar, proporcionando apoyo a la población por medio de mecanismos.
El estado de Bienestar reposa sobre cuatro pilares fundamentales, en los que destaca la educación, la salud como un principio universal y gratuito, seguridad social y servicios sociales donde son incluidos los menos favorecidos o dependientes de ayudas.
Estado de bienestar o estado de providencia se ancla sobre los conceptos políticos y económicos de cada país europeo, en donde es el estado quien provee algunos servicios en cumplimiento con los derechos sociales de la población.
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Dentro de este concepto también radican distintos modelos en todo el continente europeo con sus respectivas características:
– Modelo Socialdemócrata: impuestos altos, participación de la mujer en el sector laboral, alto nivel de confianza entre los ciudadanos, desarrollo cultural y social.
– Modelo Conservador: baja participación de la mujer, es dependiente de ayuda sociales más que de altos impuestos, mayor nivel de desempleo y desigualdad social.
– Modelo Liberal: alto nivel de desigualdad social, bajo nivel en protección social.
El estado de bienestar europeo depende como bien antes se mencionó de una gestión por parte del estado de cada país, dependiendo de sus políticas y a su vez del modelo político, diferenciado entre socialdemócrata, conservador o liberal. Después de la segunda guerra mundial el estado de bienestar fue visto como un “camino intermedio” para salir de la fuerte crisis que atravesaban los países europeos.
Durante la mitad del siglo XIX en gran parte de los países de Europa Occidental, los gobiernos adaptaron la legislación sobre la condición social de la clase trabajadora y obrera, a partir de ciertas modificaciones e inclusión dentro de esta época se implementaron además las políticas socioeconómicas que fueron conocidas hasta ahora como “estado de bienestar” moderno.
Con el paso del tiempo se ha consolidado cada vez más el estado de bienestar europeo, ofreciéndole a la población no únicamente beneficios en cuanto a la salud, educación o proyectos sociales, sino también una mejor condición política, social y cultural, sin nombrar la económica que le ha dado a Europa una gran estabilidad a sus habitantes.
Sin embargo, es importante resaltar que para que esto funcione no solo depende del estado sino también de los ciudadanos, es un fruto de unión tanto por parte de las políticas de cada país como de los habitantes, una de las maneras de conseguir un buen estado de bienestar es por medio de fuentes de empleos activas que generen producción y de esta manera el estado pueda favorecer a los que no son tan “afortunados”, hasta ahora especialistas en el tema intentan averiguar si se puede conseguir un contrato social como lo planteado por Rousseau en la humanidad.
