Gobierno panameño estudia recibir más profesionales extranjeros

Gobierno panameño estudia abrir puertas para recibir más profesionales extranjeros

El Gobierno está analizando la apertura de sus fronteras para que vengan profesionales de otros países, una medida que, según los sindicatos de trabajadores y gremios profesionales, podría agravar la situación del mercado laboral panameño, que ya cuenta con gran cantidad de mano de obra extranjera, pero que, según analistas serios, Panamá necesitará mano de obra extranjera calificada para seguir creciendo debido al bajo nivel de sus profesionales. Con información de Panamá América.
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Panamá participa de la negociación del Acuerdo Internacional sobre Comercio de Servicios (Tisa), en el que se avala el desplazamiento de trabajadores de otros países para la prestación de servicios, diálogo que se lleva a cabo entre unos 50 países.
La viceministra de Negociaciones Comerciales Internacionales, Diana Salazar, confirmó la participación del país en la negociación, pero, aunque no dio mayores detalles, aseguró que se están respetando las profesiones protegidas.
Pero el Tisa establece que todas las actividades humanas y comerciales se convierten en servicios, que el Gobierno puede concesionar a multinacionales, empresas que podrán traer su capital humano, independientemente del porcentaje de extranjeros que hoy permite la ley, explica Pedro Acosta, de la Unión Nacional de Consumidores y Usuarios de Panamá (Uncurepa).
Por ejemplo, una empresa extranjera, con el Tisa, podrá establecer una escuela y traer a los educadores de otros países, de igual forma lo haría un banco o una multinacional que invierta en un hospital, importando todo su personal.
Por esta razón, sindicatos a nivel mundial rechazan el Tisa, una negociación catalogada como confidencial, según publicaciones de medios internacionales.
A raíz de la filtración de documentos secretos que realizó Wikileaks, la organización no gubernamental Nuestro Mundo no está en Venta (OWINFS), con sede en Washington, y la federación sindical radicada en Suiza, Internacional de Servicios Públicos (IPS en inglés), iniciaron hace tres años una campaña de alerta entre gremios profesionales, de trabajadores y organizaciones sociales para presionar a los Gobiernos a que informen a la población sobre lo que están negociando.
En países de la Unión Europea (UE) y en Australia se han producido protestas y manifestaciones exigiendo a los Gobiernos el retiro de la negociación.
Medios internacionales publican que en Alemania han surgido diferencias internas en el Gobierno que señalan la inconveniencia del acuerdo, y Uruguay ya se retiró de la negociación.
Acosta considera que es preocupante que Panamá siga negociando este acuerdo, el cual una vez aprobado no puede ser objeto de conocimiento público hasta cinco años después.
Además, los sindicatos y expertos del país señalan que actualmente no se respetan las reglamentaciones con respecto a la contratación de extranjeros y con el Tisa se agravaría la situación.
Rommel Adames, exviceministro de Comercio Exterior, señala que Panamá firmó un anexo de medidas disconformes en la Organización Mundial del Comercio, en el cual no permite el ejercicio de profesiones a los extranjeros, pero hoy se hace de forma ilegal con ayuda de los panameños.
Adames enfatiza que las autoridades deben hacer cumplir las leyes.
El experto señala que algunas de las profesiones protegidas en el país son derecho, medicina, contabilidad, ingeniería y arquitectura, corredores de bienes raíces, corredores de seguros, entre otras.
Domingo Moreno, miembro de la Comisión Médica Negociadora Nacional (Comenenal), coincidió con Adames en que no se está cumpliendo con la restricción en algunas profesiones.
Para Moreno, existe mucha elasticidad por parte del Gobierno en este tema, aunado a eso la postura de los empresarios para garantizarse una mano de obra barata.
Eduardo Gil, miembro de Convergencia Sindical, indicó que las contrataciones no se dan de manera legal, hay cada vez más extranjeros que ejercen profesiones protegidas de manera ilegal.
Gil asegura que existe un desorden y la ley no se está cumpliendo , además no existe una política pública que realmente permita al panameño ser parte del desarrollo integral.
Los indicadores oficiales muestran que en medio de la desaceleración económica aumenta el número de extranjeros, se incrementa la informalidad y crece el número de desempleados.
La economista Maribel Gordón indica que más del 17% de los profesionales están desocupados.

Datos
101,786 permisos de residencias ha aprobado el Servicio Nacional de Migración en los últimos 7 años.
10,266 permisos de trabajo ha otorgado el Ministerio de Trabajo en el primer semestre de 2017.