¿Tenemos mentalidad de empleado o mentalidad emprendedora? Esta es una pregunta que muy frecuentemente nos hacemos, y es que a quién no le gustaría emprender su propio negocio, no cumplir horario y no aguantarse a un jefe fastidioso.
Lo primero que debemos saber es que ser emprendedor no solo se trata de iniciar un nuevo negocio, puesto que podemos ser empleados y tener una mentalidad emprendedora. Veamos de que se trata.
Lo primero que debemos hacer es determinar dónde estamos, si por debajo del riesgo o por encima de él y es allí que vamos a saber cuál es la mentalidad que tenemos, de empleado o emprendedor.
Cuando pensamos con mentalidad de empleado, ofrecemos nuestro trabajo y esperamos recibir un salario por nuestro tiempo y esfuerzo, sin esperar nada más y sin que importen los resultados.
Suscríbete a nuestro canal de Telegram "Inmigrantes en Madrid" para que estés al día con toda la información sobre Madrid y España, ofertas de empleo y más
Cuando tenemos mentalidad emprendedora estamos por encima del riesgo, y esto no quiere decir que se trata únicamente de querer empezar un nuevo negocio. Emprender es detectar un problema, analizarlo y resolverlo. Cuando pensamos con mentalidad emprendedora no estamos pensando en tiempo y esfuerzo, sino en resultados.
¿Qué debemos hacer para cambiar nuestra mentalidad?, dejar de pensar como empleado y empezar a pensar como emprendedor. Hay una serie de cosas que debemos hacer, entre las que destacan.
- Cuando pensamos como emprendedores, nos educamos más de lo que nos divertimos. Buscamos lo que más se valora en el mercado y es la experiencia y el conocimiento.
- No podemos temer al fracaso, pues que esto será parte de nuestra vida y cada fracaso nos dará más experiencia y conocimientos.
- Mientras los emprendedores encuentran soluciones, los empleados solucionan problemas. Esa es la razón que cuando pensamos con mentalidad emprendedora, siempre estamos buscando la forma de solucionar un problema en el menor tiempo posible.
- Los emprendedores saben poco de muchas cosas, es decir debemos tratar de estar preparados en la mayor cantidad de áreas de conocimientos.
- La mentalidad emprendedora tiene objetivos claros. Se traza metas y trata de obtener resultados rápidamente.
- La quietud no caracteriza la mentalidad emprendedora, por el contrario siempre está buscando nuevas respuestas y nuevos retos.
- El miedo al cambio es muy común y la mentalidad emprendedora suele enfrentarlo con la acción.
¿Invertir o gastar?
Una de las grandes diferencias entre la mentalidad de empleado y la mentalidad emprendedora es que el primero cuando obtiene ingresos extras, busca como gastarlo; mientras que el emprendedor quiere invertirlo, ya sea en adquirir conocimientos o en actividades que puedan generar nuevos ingresos.
Tener el control de nuestra vida y tener un plan de acción definido caracteriza la mentalidad emprendedora, mientras que el empleado cree que está destinado al fracaso, por lo que tiene miedo de definir metas y objetivos.
Pensar en grande, no conformarse y ver una oportunidad en todo, es lo que nos diferencia de las mentalidades de empleado, quienes solo ven obstáculos y no hacen nada para cambiar esa situación en su vida.
Cuando somos empleados pensamos que cada día que vamos al trabajo debe ser cancelado, pero cuando pensamos con mentalidad emprendedora, tenemos la certeza que así pasemos mucho tiempo sin cobrar u obtener ganancias económicas por el trabajo que estamos realizando, en un corto o mediano plazo se verán los resultados y tal vez vamos a cobrar muchas veces por un trabajo que no estamos realizando.
La clave está en pensar en nosotros mismos como empresa, en pensar como afirma el presentador de CNN Xavier Serbia: “No eres un empleado. Eres una empresa que le vendes tus servicios a otra empresa. Eso es tener mentalidad emprendedora”.
Así estemos trabajando en una compañía, debemos tener claro que no estamos vendiendo nuestro tiempo y esfuerzo, sino que como empresa estamos vendiendo nuestros servicios a otra empresa, por lo tanto, debemos empezar a pensar como empresarios y administradores de nuestro propio talento.
Si te gustó la información compártela en tus redes sociales. Si lograste cambiar tu mentalidad y ahora eres un emprendedor exitoso, cuéntanos tu experiencia en los comentarios.
