Emigrar de tu país no es nada fácil, dejar tu zona de confort puede ser la decisión más difícil que puedas enfrentar en tu vida, nadie quiere irse y dejar tantas cosas, entre ellas familia, amigos, costumbres, el clima y su gente.
Los venezolanos anteriormente no tenían esa cultura de emigrar, esto surge luego de uno cuantos años para acá por la situación país. Las decisiones improvisadas de las políticas arrinconan a diario las familias dejando como alterativa que la única salida es la huida del país.
Al principio de esta diáspora cuando te tocaba despedir a un familiar o amigo, por tu cabeza pasaban tantas cosas que incluso los juzgabas, ¿Por qué se van? pero pasa el tiempo y vez que nada ha cambiado, sino que todo va en retroceso y esa decisión de irte toma fuerza si quieres tener un verdadero futuro y más al ver la estabilidad que tienen los que se han ido.
Aposté a un mejor futuro
Las razones para tomar la decisión de emigrar las encuentras luego de reflexionar todos los días las realidades de tu entorno, tanto las propias como de familiares y amigos. En este ese país es evidente el retroceso que se está experimentando, la inflación los consume, el poder adquisitivo cada día es menor, se violan los derechos del trabajador, tanto así que salir a trabajar cuesta más dinero que quedarse en casa.
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Cuando tienes que pasar mil y una travesía para llegar al trabajo, tampoco no hay transporte, lo difícil de obtener el dinero en efectivo, en este país lo que en cualquier parte del mundo es un actividad normal de la vida cotidiana, en Venezuela se vuelve un eterno dolor de cabeza, no se ha terminado el día cuando mañana piensas si podrás llegar o no nuevamente al trabajo y eso no es tener una vida.
Los venezolanos están conscientes de la situación grave que ocurre, pero a muchos no parece importar, hay quejas cada día, pero no hay cambios todo sigue igual y con el pasar de los años nada será diferente, se seguirá viviendo igual, sin un futuro.
Hay muchas razones que te impulsan a apostar por una mejor vida y a tomar la decisión de emigrar, desde ese momento tu vida cambiará su rumbo y tu único objetivo es alcanzarlo, salir de Venezuela se convierte en el primer pensamiento y en el último del día.
La vida está llena de muchos intentos
Una vez con el objetivo alcanzado ya fuera de tus fronteras, comienzas esa nueva vida, es sorprendente como tus perspectivas cambian al encontrarte frente otras realidades que te brinda esa nueva calidad de vida.
Sin embargo, la vida está llena de muchos intentos y puede que tu destino inicial no sea lo que esperabas y te toque nuevamente buscar las razones de emigrar a otro lugar, evitando cometer los mismos errores.
Reinvéntate y no te quedes estancado, una vez más, comienza de cero, pero organízate para que el proceso de adaptación en tu nuevo destino fluya, no pienses en lo que dejaste atrás, piensa que es otro intento de la vida, se hace borrón y cuenta nueva. El pasado será experiencia y si no resultó vendrá algo mejor.
El éxito se basa en las veces que te levantas hasta lograrlo, así que comienza destacando tus cualidades, aprende lo que puedas, trázate unas metas y lucha por lograrlas, adáptate a sus creencias, a su estilo de vida, a la actividad laboral, su cultura y comida, pero siempre mantén tu personalidad y esencia donde quiera que vayas.
El venezolano se hace sentir donde se para, empieza de nuevo tantas veces que sea necesario, porque de la constancia nace el éxito y en algún momento lograrás lo que buscas, sino te atreves te quedarás con la incertidumbre de saber qué destino la vida te fuera dado.
Por lo tanto, si fallaste al emigrar a un primer destino, no es algo de qué preocuparse, la vida es una sola, inténtalo de nuevo y se feliz.
